En Uruguay, el cáncer de ovario es uno de los diez tipos de cáncer más comunes y es la sexta causa de muerte por cáncer en mujeres. Entre 2016 y 2020, se diagnosticaron alrededor de 212 nuevos casos cada año, y aproximadamente 146 mujeres fallecieron anualmente debido a esta enfermedad.
La mayoría de los cánceres de ovario (alrededor del 80%) se detectan en etapas avanzadas, lo que dificulta su tratamiento. Hay tres tipos principales de cáncer de ovario:
- Epitelial (que representa entre el 85% y el 90% de los casos),
- de células germinales, y
- de células estromales (que son menos del 10%).
Dentro del cáncer epitelial, existen cinco subtipos según el tipo de célula predominante: serosos, mucinosos, endometrioides, de células claras y transicionales. Cada uno tiene características genéticas y moleculares diferentes.
La presencia de mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 puede hacer que algunas mujeres respondan mejor a los tratamientos.
El tratamiento estándar para el cáncer de ovario avanzado implica una cirugía para eliminar la mayor cantidad posible de tumor, seguida de quimioterapia con medicamentos como el platino y el taxano. Aunque muchos cánceres de ovario responden bien a este tratamiento, la mayoría de las mujeres diagnosticadas en etapas avanzadas experimentarán una recaída.
La respuesta al tratamiento de quimioterapia con platinos es muy importante para determinar el pronóstico y las futuras opciones de tratamiento. Según la respuesta, se clasifican en tres categorías:
- Enfermedad sensible a platinos: cuando la recaída ocurre después de 6 meses o más tras el tratamiento.
- Enfermedad resistente a platinos: si hay respuesta al tratamiento, pero la recaída ocurre en menos de 6 meses.
- Enfermedad refractaria a platinos: si no hay respuesta al tratamiento o si la enfermedad empeora durante la quimioterapia.
Las terapias de mantenimiento ayudan a reducir las recaídas y a mejorar la calidad de vida de las pacientes. Una de estas terapias incluye los inhibidores de la enzima PARP, como el Olaparib. Este medicamento se toma por vía oral y actúa destruyendo las células tumorales que tienen mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2. El Olaparib ha demostrado mejorar la supervivencia sin progresión de la enfermedad en mujeres con cáncer de ovario avanzado, especialmente en aquellas que son sensibles a la quimioterapia con platinos, ya sea en el primer tratamiento o en caso de recaída.
Fuente: Normativa de cobertura